Siendo medio día aproveche el tiempo y me tome una lata de cerveza y maní que compartí con unos chicos que venían del norte a ver a los que mas fans suman por estos días, los Killers. Simpática esa gente, los tres chicos piolas, tranquilos, “quitaditos de bulla”, como mi abuelo diría “no toma ni juma” . Y pude comprobar algo que alguien me había comentado en una ocasión. La gente del norte cuando habla de sus contemporáneos lo hace bajo el termino “Niños”, homologo capitalino de “cabros”, o para los mas retros “chiquillos”. Comprobado , estos iquiqueños lo hacían de ese modo, lo cual me parecía gracioso.
Para hacer la hora (Puertas a las cinco, primer acto a las seis.) la productora del evento del mismo nombre del festival (que original no?) había dispuesto una serie de actividades : locales con el típico merchandising alusivo a los grupos, se vendían números anteriores de revistas de música, una carpa con taca-tacas, y lo, a mi juicio, mejor de todo, una tiendita AlgoRecords, incluido uno de los hnos. Gómez vendiendo los discos del sello. Me vi tentado a llevarme el cd de Tío Lucho para la casa, a pesar de que Álvaro me persuadía para que comparara lo ultimo de Guiso: “Es difícil hacer cosas fáciles”
Tocaban bandas nacionales para hacer la previa, por mi parte hice la siesta en el pasto. Y a ratos interrumpía mi sueños la desagradable dicción de Sergio Lagos. Primavera de Praga no estuvo mal aunque el resto no lo pude ver ya que hice una fila de quince minutos para un completo y una bebida de 1000 pesos !!. Estaba en el repertorio Saiko. ¿Existía todavía Saiko? ¿No fue lo suficientemente malo el álbum “Las Horas” para enterrar vivo al grupo?. La opinologia y los aires de diva de Malebrán eran incompatibles con la riqueza creativa de la banda . Saiko dejo de ser lo que fue a fines de los noventa desde hace mucho antes que entrara a sus filas la nueva vocalista.
Ignoro si alguien pescó o no el numerito de Saiko, ya que todos estaban atrincherados desde cada frente, alrededor del Arena. Cancha Gral. Plateas, Galería y Cancha Preferencial. La espera ya había parecido bastante, pero a esa altura ya no importaba haber pagado de mas por comer, haberse quemado al sol y estar apretujado entre ajenos aromas y fluidos y faunas pseudo burguesas para agarrar alguna buena ubicación en eso que denominaban “cancha-vip”, concepto que recién se estrenaba . No me quejo, quede bastante cerca, cuarta fila al lado izquierdo.
Haciendo la hora con Starsailor
Los había escuchado solo de nombre, jamás una canción, nunca un video, pero no lograron seducirme. Planos, aburridos y lateros, unos Keane 2.0. Pude reconocer dos temas, pero tampoco me excitaron. Ya al cuarto tema quería que fuera el ultimo. Debo rescatar la limpieza de la banda en cuanto a la continuidad del show, se notaba seguridad lo que no vi en Killers. Cuando ya el publico demostraba su ansiedad, Starsailor se aferró a viejos trucos sucios, los covers. Imperdonable. Asesinó una canción de Presley rematando después con el tema bailable “Umbrella” (no recuerdo quien la interpreta).
Travis, el pasto del otro lado es el que siempre crece
Nos tenían en suspenso. Suben al proscenio con batas de boxeadores los integrantes de Travis. En el intertanto, que fue eterno, al parecer me deje llevar de mas por mis emociones, lloré (o algo que se le asemeje) durante los primeros tres temas, hasta que en relidad pude comprobar racionalmente que tenia a menos de cuatro metros a una de las bandas que desde niño había escuchado, testigos de mis mas remotas trancas, rollos y problemas pre- adolescentes, amores no correspondidos, relaciones frustradas e insulsas quimeras. Claro que con algunas canas, arrugas y mas desgastados, pero el vigor era el mismo. La energía y la
potencia seguía ahí mucho mejor que en los discos. No es algo mió, quizás pongas en juicio mi objetividad pero es un pensamiento generalizado Travis tuvo un feedback increíble con los presentes. A pesar del manoseado discurso como “sentirse como en casa a posar de estar tan lejos” o“nos sorprendieron en el aeropuerto, había tanta gente !!” se notaba un cariño real, un manejo inteligente con la audiencia. Incluidas bromas con el Tecladista invitado al intervenir en “Good Feeling”. El infaltable comentario gracioso de Fran.
Si Healy interactuó con la gente, Andy Dunlop no lo hizo nada de mal, y que mejor que lanzándose con guitarra y todo a las masas en pleno solo de “All I Wanna Do Is Rock”. Abrieron son Selfish Jean, revivieron viejos acordes del primer disco, como “U16”. Destacan una intima “Flowers in the Window”, todos los músicos unidos evidenciando una vez mas el fíato con una “versátil-tokata-colectiva” cuando por unos instantes Healy solo cantaba, Primrose se ocupaba del pandero y los chicos de las cuerdas se encargan de la única guitarra presente en la canción. Luego se despedirían por segunda vez con “Why Does it alway rain on me?”. jamás pensé que tocarían temas del primer álbum, un gesto que sorprendió y conmueve.
Técnicamente Travis se mostró solidó, mas allá de los clásicos acoples en un par de temas, nada mas. Una cohesión nada rara en una banda con diez años de carrera. Un justo repaso por sus discos y una claro deseo de pasarlo bien. La entrada al estilo Rocky estuvo de mas, bastaba solo con entrar por bastidores a ocupar su sitio ¿Pero algo debían hacer frente al circo que tenia instalados los Killers no?. Travis ; tu publico te ha valorado siempre, no necesitas ser efectista para sorprender.
Secamente un irrespeto a su trayectoria el hecho de dejarlos como el segundo numero. ¿Teníamos que entender la “fiebre asesina”? Las niñas lays y la fauna asistente morían por Flowers y su sequito. De hecho los Killers fue la banda lejos mas coreada y con el lujo de tomarse tiempo de mas estando al final del show. Son los avatares del mercado.
Matando buena música con los Killers
Después del éxtasis de Travis se venían Killers, me parecía interesante escucharlos en vivo, un grupo que en tan poco tiempo logro posesionarse en el mercado y en la cultura adolescente. Una banda con un sonido bien europeo pero con una actitud muy gringa, hechandole mano tambien a toques ochentenos, de hecho asumen sin tapujos sus claras inspiraciones en los Smith y en Joy Division. Flowers emula obsesivamente los gestos y pasos de Ian Curtis, no solo gracias al cover de Shadowplay, sino que adopta los mismos pasos y movimientos. Menos mal que les falta bastante para alcanzar a los míticos de Manchester.
Los recibía un excitado publico y un parafernalico escenario. Flores, luces entre los instrumentos, una gran cortina de cabaret que montaba (también con luces) el nombre de su reciente producción “Sam`s Town”. Y en el medio un antiguo piano le daba el halo nostálgico al ambiente. Tras una alargada introducción comienza el show, sale un Brandon con su tan conocido estilo formal. La voz desde los primeros temas se nota débil, fría y podemos confundir su aparente nerviosismo con indiferencia hacia el publico. Nos entretenía su hiperactividad pero hubiera sido grato que se complementara con su calidad vocal, cual Mercury jugaba con el micrófono, cual Morrisey meneaba su espalda. Sus anónimos músicos ni se inmutaron ante la ovación interminable de la fiel audiencia. En realidad no era tan necesario, por poco pierdo un tímpano con el grito desalmado de una seguidora hacia el frontman de Killers. Ante eso sus compañeros mucho no pueden hacer, aunque no se empeñaron tampoco.
Recién en el séptimo tema “Midnight Show” se noto una voz mas equilibrada con el sonido. Y ya me era mas entretenido disfrutar y justificar la larga espera para comprobar que tan bueno era este fructífero producto en escena. De hecho iba muy bien predispuesto, me sabia varios temas aparte de los oreja (sigo sin entender la omisión “Indie rock and roll for me”), tienen una dinámica original que se sale de los patrones actuales. De esas bandillas nuevas tratando de revivir viejos sonidos, es la mas efectiva, vende. Los hits radiales comprobaron sin duda alguna que el Arena estaba atestado de fans de los aludidos, “Some Body Told Me”, “Mr. Brigthside” “Bones” y “Read my Mind” fueron aclamadas por la mayoría. En Resumen: el cierre fue entretenido, pero me esperaba mas calidad musical, desestimé las puesta en escena por ser pretenciosa, al igual que al flemático Brandon en acción facilitó que se nos hiciera al show un poco mas largo. Me quedo con un par de interrogantes ¿O estos gringos aun creen que nosotros seguimos siendo entupidos sudacas para darnos en show mediocre o (a sabiendas) que a Killers les falta mucho han sido sobrevalorados por este circuito musical?.
(vamos a comprar lentes por mientras?)
Writing to Reach You
Good Feeling
U16 Girls
